La formación profesional después de un año de pandemia
El 2020 fue un año desafiante para el mundo y, en particular, para nuestra región donde la crisis en el mercado laboral provocada por la pandemia puso en evidencia y, simultáneamente, profundizó las importantes desigualdades, los nuevos retos y los déficits de trabajo decente (OIT, Panorama Laboral en América Latina y el Caribe, 2021).
En los campos de la educación y la formación profesional, con el cierre casi total de las actividades presenciales y las interrupciones en los aprendizajes en el trabajo, la situación también ha sido crítica. Las instituciones fueron obligados a poner en juego diversas estrategias, innovando y transformando su oferta, la formación de sus docentes, la evaluación y certificación de aprendizaje a distancia.
Algunas líneas de acción que hemos constatado incluyen:
- La incorporación de procesos de formación a distancia, junto a una revisión de los aspectos metodológicos, de formación de docentes y evaluación, entre otros. Algunos de los principales desafíos que surgen, junto a la necesidad de formar a participantes, docentes, y equipos institucionales en competencias digitales, son de adquirir las habilidades para usar los dispositivos tecnológicos, identificar nuevos contenidos, gestionar la información y aprender a colaborar digitalmente;
- La generación de asociaciones con plataformas digitales y con proveedores de formación online para implementar la formación a distancia para muchas instituciones;
- La puesta en marcha de acciones complementarias, para asegurar que algunos grupos de la población tengan las condiciones básicas necesarias para sostener su participación en la formación (por ejemplo, acceso a equipos y a paquetes de datos); y
- La integración de la formación en competencias transversales o competencias blandas ha sido clave en el contexto de la pandemia, en áreas como la capacidad para autoadministrar la formación, organizar el tiempo, trabajar en equipo y comunicarse.
De la misma manera, desde OIT/Cinterfor, el proceso de elaboración y implementación de un plan estratégico se vio acelerado por las nuevas circunstancias, impulsando la transición de nuestra oferta de asistencia técnica hacia cursos y asistencia técnica en formato virtual, videoconferencias, seminarios web y creación de grupos de innovación colaborativa en áreas de interés común.
Hemos invertido y fortalecido nuestra plataforma digital y sitio web, y también nos hemos capacitado y preparado para el desarrollo de esta nueva generación de servicios a las instituciones miembros de nuestra red y los constituyentes tripartitos, con la calidad u oportunidad necesarias, potenciando la comunicación, el intercambio de conocimientos y la cooperación técnica.
Más de doce meses después de iniciada esta pandemia, los aprendizajes son muchos, así como también lo son los nuevos desafíos que la formación profesional tiene por delante. Nuestra capacidad de adaptación y atención a las demandas que surgen de estas transformaciones es fundamental, dado que muchos de estos cambios han llegado para quedarse.
Para cumplir nuestra misión de servir a las instituciones de formación profesional y los constituyentes tripartitos, es imprescindible continuar actualizando, innovando, investigando y generando acciones de asistencia y cooperación junto a nuestra inmensa Red, enfocada en hacer realidad el potencial transformador de la formación profesional en la vida de las personas.
Saludos cordiales,
Anne Caroline Posthuma
Directora OIT/Cinterfor